La provincia de León ocupa una superficie de 15.581 Km2, siendo la más extensa de las nueve que integran la Comunidad Autónoma de Castilla y León y la séptima en el computo nacional. Localizada en el extremo noroccidental de dicha comunidad, entre los 4º 44' - 7º 5' de longitud Oeste y los 42º 1' - 43º 14' de latitud Norte, se caracteriza ante todo por una gran diversidad paisajística producto de la combinación de factores tanto físicos como humanos; una diversidad que la individualiza frente a las provincias limítrofes de Asturias y Santander por el Norte, Palencia por el Este, Zamora y Valladolid por el Sur y Orense y Lugo por el Oeste.

Fig. 1: Provincia de León

Desde el punto de vista estructural, el relieve Provincial se organiza en torno a dos grandes unidades morfológicas profundamente contrastadas: La Montaña y La Meseta.

Las formaciones montañosas ocupan una parte considerable del espacio Provincial (más del 50% de la superficie total está por encima de los 1.000 m. de altitud), articulándose en dos conjuntos claramente diferenciados en función de su litología y morfogénesis.

En primer lugar, el sector septentrional perteneciente a la Cordillera Cantábrica que se inicia por el Este en Peña Ubiña y se continúa hacía el Oeste hasta el complejo macizo calcáreo de los Picos de Europa. Caracterizado por la alternancia de rocas duras (cuarcitas y calizas) y blandas (pizarras), es en este conjunto donde se alcanzan las cotas máximas de la provincia (por encima de 2.500 m.) y donde se conocen las formas de relieve más abruptas. Los fuertes contrates topográficos producto de la orogenia hercínico-alpina, se han visto acentuados por el encajamiento de la red fluvial que ha cortado las estructuras perpendicularmente. Los fenómenos de glaciarismo en las cumbres más elevadas, los importantes complejos kársticos, las encajadas gargantas y hoces de paredes casi verticales y la peculiar distribución de pequeñas cuencas intramontanas son los elementos más significativos de esta unidad.

En segundo lugar, el sector occidental de la Provincia pertenece a la macroestructura de las Montañas Galaico-Leonesas; producto de una tectónica de bloques sobre materiales paleozoicos, este macizo se caracteriza por un intenso y continuado proceso de modelado cuyo resultado son elevadas pero aplanadas superficies culminantes de altitud más modesta (1.500-1.800 m) que, únicamente en algunos crestones residuales superan los 2.000 m. Igualmente son características las huellas glaciares de gran calidad ambiental (Lagos de La Baña y Truchillas), las gargantas producidas por la incisión fluvial y la accidentada topografía.

Una peculiaridad de este conjunto sin duda la constituye la “hoya” o fosa de El Bierzo, depresión tectónica encubierta bajo depósitos terciarios de materiales blandos, que modificados por el modelado cuaternario han dado lugar a un paisaje de campiña y amplias vegas que contrasta con el cerco montañoso que la enmarca.

La Meseta leonesa ocupa la parte central y sureste de la provincia poniendo el extremo Norte y Oeste a la gran cuenca sedimentaria de materiales terciarios que ocupa el interior de España. Constituye una plataforma elevada (entre 700 y 1.000 m. de altitud) ligeramente inclinada hacía el Sur y diseccionada en sentido Norte-Sur por una densa red hidrográfica. Topográficamente es un relieve prácticamente horizontal de páramos detríticos con suaves ondulaciones únicamente interrumpidas por la sucesión de terrazas e interfluvios, colonizados en algunos casos por lagunas endorreicas que ratifican esa ausencia de pendientes.

Adaptada a estas unidades morfoestructurales, la red hidrográfica provincial participa de tres cuencas: Norte, Miño - Sil y Duero, si bien con clara hegemonía de esta última.

La Cuenca del Duero (72,1% de la superficie Provincial) recoge tres importantes cursos como son el Esla (al que vierten los ríos Porma, Curueño, Torío y Bernesga), el Órbigo (resultado de la fusión del Luna y del Omaña) y el Cea. Todos ellos nacen en las cumbres de la Cordillera Cantábrica y tienen un régimen nivo-pluvial o pluvial.

La divisoria con la cuenca Miño-Sil la constituyen los Montes de León, a partir de los cuales hacia el Oeste y a lo largo de 3.959 Km2 (el 27,7% de la superficie provincial) se expande el sistema Sil. Este río de régimen pluvial, con afluentes como el Búrbia, Boeza o Cabrera, aporta un caudal abundante y sostenido a lo largo de todo el año que, junto con la orografía, ha favorecido su aprovechamiento hidroeléctrico y le convierte en el auténtico eje vertebrador de la comarca de El Bierzo.

Por último, la cuenca Norte está escasamente representada (el 2,2% de la superficie provincial) limitándose a los enclaves del Norte (valles de Valdeón y Sajambre, drenados por el Sella y Cares respectivamente) y en el oeste las cabeceras de los valles de Balouta. Son ríos de escaso recorrido y régimen nivopluvial cuya intensa acción morfogenética ha originado desfiladeros de gran calidad paisajística como los Beyos y la Garganta del Cares.

Desde el punto de vista climático, la provincia de León es un espacio de transición entre la Meseta y las cadenas montañosas. A pesar de la gran variedad existente, el clima provincial pertenece al tipo mediterráneo de influencia continental, matizado en algunos sectores por la influencia atlántica. Las principales características son la elevada amplitud térmica, la presencia de inviernos muy fríos y largos y casi permanente riesgo de heladas durante todo el año, el efímero significado de la primavera y otoño y las temperaturas moderadas de los cortos veranos que padece la provincia.

Las precipitaciones se distribuyen irregularmente tanto en espacio como en tiempo. Así, en los sectores de precipitación más abundante (franja Norte y Oeste) se registran valores por encima de 1.500 mm. anuales, a menudo en forma de nieve, frente a los apenas 500 mm. de las zonas de meseta. Estas precipitaciones en ambos casos se concentran en los meses invernales y otoñales, por lo que a pesar de que se puede hablar de una cierta riqueza hídrica, la aridez estival persiste en la mayor parte del espacio provincial durante los meses más cálidos, siendo especialmente intensa en la llanura en julio y agosto.

En función de los condicionantes termopluviométricos y la disposición orográfica, la cobertura vegetal de la provincia también se va a caracterizar por la diversidad y complejidad. Las formaciones atlánticas (haya, roble y abedul entre otras) jalonan los conjuntos montanos del Norte y Oeste provincial, siendo sustituidos en los pisos alpino y subalpino por los ricos pastizales que tan importantes han sido para el desarrollo económico de estas zonas.

La encina, especie emblemática que representa la influencia mediterránea, ocupa en la actualidad una reducida porción de la cuenca sedimentaria y de las solanas de la transición entre la montaña y la meseta, ya que ha sido una de las más castigadas por el hombre. A pesar de que la Meseta es el espacio idóneo para su desarrollo, las continuas roturaciones y el regadío han sido sus principales enemigos. Junto a ella, otras especies mediterráneas como alcornoques, quejigos, enebros y almendros perviven en las áreas con microclimas más cálidos como ocurre en El Bierzo.

Finalmente, la riqueza forestal de la provincia se complementa con la vegetación de ribera (chopos, sauces, alisos, álamos, fresnos) que se pueden encontrar a lo largo de cualquier curso fluvial y las repoblaciones, a base de pinos fundamentalmente, que desde mediados de los años 40 se han venido practicando.

Todo este conjunto de variables físicas ha condicionado un modelo de poblamiento concreto, en el cual conviven espacios de hábitat concentrado basados en el aprovechamiento agrario de los recursos y de morfología regular localizados en la llanura y especialmente en las vegas y riberas, con espacios de montaña asociados a un hábitat disperso y de explotaciones extensivas, con una morfología peculiar de los asentamientos totalmente adaptada a los accidentes topográficos.

La geografía humana de la provincia de León viene determinada por una serie de factores que podemos resumir en la grana variedad de poblamientos según las variadas comarcas que conforman esta provincia.

En todas ellas existe una significativa actividad agraria, en algunas de ellas actividad casi exclusiva, en otras una actividad ganadera y en otras una actividad industrial basada en la extracción de minerales, fundamentalmente pizarra y antracita, así como una industria de producción de energía eléctrica.

El Bierzo, El Páramo, Laciana, La Maragatería, Babia, La Cepeda, La Valduerna, Ribera del Órbigo, La Cabrera, La Valdería, Tierra de la Reina, Somiedo, Vega del Esla, La Sobarriba, Tierra de Campos y Las Omañas son las comarcas que conforman esta provincia.

Dentro de ellas encontramos comarcas casi despobladas o con un muy bajo índice de población junto con otras que mantienen un acentuado índice de crecimiento, pero el conjunto de la provincia da una clara situación de migración, una migración interna hacia los núcleo poblados con abandono de los caseríos y pequeñas poblaciones dispersas.

Así mismo, una emigración hacia el resto de España en la actualidad (Barcelona, Madrid, Valladolid, levante y otros lugares) y que en los años 50 y 60 del siglo XX se dirigió hacia Europa y América.

Se produce, no obstante, un fenómeno de inmigración, durante los años 60 y 70 del pasado siglo, procedente de Portugal, países africanos y Pakistán, que proporciona mano de obra que se centra en las actividades extractivas de carbón y antracita en la comarca de El Bierzo.

El cómputo global de la evolución de la población en la provincia en relación con la evolución de la población en el estado podemos observarlo en la table 1 y más gráficamente en la figure 6 en la que observamos cómo el crecimiento de la provincia se mantiene por debajo del índice de crecimiento nacional, especialmente durante los años 60 y 70, los de mayo emigración, aunque se puede observar una tendencia a recuperar unos valores de convergencia con los valores de crecimiento nacional.

Fig. 6: Crecimiento relativo de la población de España y León (1900-2001)

Fuente: INEbase y elaboración propia

El peso poblacional de la provincia de León en el cómputo nacional disminuye de manera constante y significativa pasando de un 2.1 % en el año 1.900 al 1.2% en el año 2.001 (table 2) observándose en la figura que se adjunta (figure 7) una clara tendencia a la disminución de la importancia de la población leonesa en el ámbito nacional.

Fig. 7: Tendencia evolutiva de la población de León (1900-2001) respecto al índice nacional (en %)

Fuente: INEbase y elaboración propia

Esta perdida relativa de población se manifiesta igualmente tanto en varones como en mujeres (table 3) y se aprecia gráficamente en las figure 8 y figure 9.

Fig. 8: Crecimiento relativo de la población de España y León (1986-2001) - VARONES

Fuente: INEbase y elaboración propia

Fig. 9: Crecimiento relativo de la población de España y León (1986-2001) - MUJERES

Fuente: INEbase y elaboración propia

La pérdida de población se manifiesta, así mismo, en la disminución de habitantes por kilómetro cuadrado, densidad de población, como muestran la table 4 y se aprecia en el gráfico figure 10.

La pérdida de densidad de población se manifiesta claramente, asociada a la pérdida total de población, al estudiar los datos específicos de la provincia de León (table 5) y se observa claramente en el gráfico que presenta la figure 11.

Fig. 10: Evolución de la densidad de población en España y en la provincia de León

Fuente: INEbase y elaboración propia

Fig. 11: Evolución de la densidad de población en la provincia de León

Fuente: INEbase y elaboración propia

VARIACIONES RELATIVAS DE POBLACIÓN POR PROVINCIAS

Fig. 12: Variaciones relativas de población por provincias

Fuente: INEbase y elaboración propia

La variación de la población se observa en la figure 12 en la que vemos el mapa de España con la representación de las provincias coloreadas en función del aumento, mantenimiento o pérdida de población, según escala que se acompaña, y en la que la provincia de León queda situada dentro de un gran número de provincias españolas con un ligero índice de perdida de población (0<-10).

Para estudiar este caso, se dispone de los datos de población nacional por edad y sexo, agrupados en grupos quinquenales correspondientes a año 2000.

Procesados estos datos de la table 6 se obtiene la figure 13, Pirámide Poblacional de España, y la figure 14, Pirámide de Población de España y León, de cuyo análisis se pueden deducir varios aspectos.

Fig. 13: Pirámide de población de España

Fuente: INEbase y elaboración propia

Esta pirámide nos aclara la visión sobre la realidad de la población española, una población que tiende a envejecer, y que se nota en que las cohortes mas jóvenes son mucho menos abultadas que las de edades adultas.

También vemos incisiones como las de las cohortes de los 60 y 65 años debido seguramente a la emigración que se produjo en España hace unos cuarenta años, justo cuando este grupo poblacional tenía sobre los veinte o treinta años de edad.

Otro aspecto a destacar es el famoso «baby boom» en los 60 que daría lugar a un gran aumento de la natalidad y por tanto se traduce en el actual engrosamiento de las cohorte de los cuarenta años.

Si comparamos las pirámides de España y León observamos unas claras diferencias que podemos resumir en los siguientes puntos:

• Aumento de las cohortes de las personas mayores, de 60 a 80 años lo que indica un claro dominio de personas mayores de 60 años residentes en la provincia de León sobre los residentes en el estado.
• Disminución de las cohortes de los 20 a 40 años lo que indica un menor número de habitantes en las edades comprendidas entre los 20 y los 40 años (entre los varones se mantiene algo más) siendo la edad propicia para la emigración
• Disminución de las cohortes de las edades más pequeñas lo que señala un consecuente diferencial en los residentes menores de 14 años que viven con sus progenitores

Fig. 14: Pirámides de población de España y León

Fuente: INEbase y elaboración propia

Par el estudio de la evolución de la población en la provincia de León se dispone de los datos contenidos en la table 7, datos que quedan estructurados según figuran en la table 8 por grandes grupos de edad.

Esta evolución se observa en los gráficos desarrollados y mostrados en las figure 15, figure 16, figure 17, figure 18, figure 19 y figure 20.

Fig. 15: Evolución de los grandes grupos de edad - Nivel Nacional

Fuente: INEbase y elaboración propia

Fig. 16: Evolución de los grandes grupos de edad - León

Fuente: INEbase y elaboración propia

Fig. 17: Evolución de los grandes grupos de edad - Nivel Nacional - Varones

Fuente: INEbase y elaboración propia

Fig. 18: Evolución de los grandes grupos de edad - León - Varones

Fuente: INEbase y elaboración propia

Fig. 19: Evolución de los grandes grupos de edad - Nivel Nacional - Mujeres

Fuente: INEbase y elaboración propia

Fig. 20: Evolución de los grandes grupos de edad - León - Mujeres

Fuente: INEbase y elaboración propia

En las cuadros anteriores vemos como la tendencia generalizada es la de un descenso del grupo de edad joven, frente a un aumento porcentual de los grupos anciano y adulto en mayor medida; además, este aumento de contingentes del grupo adulto desemboca poco a poco en un mayor número de efectivos en el grupo de ancianos, con lo cual el envejecimiento de la población resulta evidente.

En el siguiente cuadro (table 9) vemos como los índices de vejez y juventud aumentan y disminuyen respectivamente, lo que nos indica una vez mas el envejecimiento de la población tanto en España como en León y una clara disminución de la juventud, producto de los bajos índices de natalidad de los últimos años.

Esta evolución se observa más claramente en los gráficos que siguen (figure 21 y figure 22) donde se observa, además de que el índice de vejez de León se encuentra muy por encima de la media nacional, cómo este continúa con una tendencia a aumentar, separándose aún más del índice nacional.

Situación casi contraria se observa con el índice de juventud, por debajo de la media nacional y con tendencia a una disminución mayor que esta media.

Fig. 21: Índice de Vejez

Fuente: INEbase y elaboración propia

Fig. 22: Índice de Juventud

Fuente: INEbase y elaboración propia

Las tasas de dependencia se refieren a la relación que hay entre el grupo productor, el adulto, que es el que esta en edad de trabajar, y los otros dos grupos sustentados que son los jóvenes y los ancianos.

En este caso, según podemos ver en la table 10, la dependencia de los jóvenes va disminuyendo pero porque también han disminuido mucho sus efectivos; en cambio, el caso contrario se da en el grupo anciano donde aumenta la dependencia debido al aumento de contingentes mayor que el del grupo adulto.

Si observamos los gráficos (figure 23 y figure 24) observamos una tasa menor que la media nacional en la dependencia juvenil, pero con una tendencia similar, a diferencia de la tasa de dependencia de los ancianos, que es mayor que la media nacional, con una clara tendencia divergente,y con un claro aumento de esta tasa de dependencia.

Fig. 23: Tasa de dependencia Juvenil

Fuente: INEbase y elaboración propia

Fig. 24: Tasa de dependencia Anciana

Fuente: INEbase y elaboración propia

La sex ratio indica la relación entre el número de hombres y el número de mujeres. Normalmente las mujeres son poco más del 50% de la población. Una población con más del 50% de hombres se dice que tiene un alto índice de masculinidad. Una población con más del 55% de mujeres tiene un alto índice de feminidad.

Si analizamos los datos de que disponemos (table 11 y figure 25) observamos una situación muy diferente en el año 1991, con un sex ratio en la provincia de León muy próxima al punto de equilibrio, 50 %, y muy por debajo de la media nacional, situación que ha cambiado drásticamente en el quinquenio 91-96, llegando a superar la media nacional, y situándose en el año 2000 prácticamente en los mismos valores de esta media nacional.

Esta tendencia quizás se deba a la llamada de mano de obra que se ha producido durante los años 90, fundamentalmente en las obras públicas y en un tenue proceso de industrialización aflorado en toda la provincia con la proliferación de pequeños polígonos industriales.

Pude incidir, así mismo, la vuelta de emigrantes que retornan ante el cambio de tendencia socioeconómica y de bonanza que se produce incluso a nivel nacional.

Fig. 25: Sex ratio

Fuente: INEbase y elaboración propia

Por último, observamos el Índice de Dependencia como relación absoluta entre las capas dependientes, juventud y ancianos, y las capas productivas, población adulta, (table 12 y figure 26) y observamos cómo se ha pasado de una situación en que este índice de pendencia ha pasado de ser inferior a la media nacional a mantenerse y superar con creces esta media, con una ligera tendencia al aumento, mientras la media nacional desciende de manera notoria. No obstante, se observa una atenuación en esta tendencia al crecimiento de este índice de dependencia e incluso una tenue indicación hacia su descenso.

Fig. 26: Índice de dependencia

Fuente: INEbase y elaboración propia

Al iniciar el estudio de los movimientos naturales de la población nos fijamos en los indicadores de las mujeres en edad fértil, las comprendidas entre los 15 y los 49 años, y observamos que la provincia de León se encuentra muy por debajo de la media nacional manteniendo el diferencial sobre cinco puntos a lo largo del periodo estudiado. (table 13 y figure 27).

Fig. 27: Mujeres en edad fértil

Fuente: INEbase y elaboración propia

La tasa bruta de natalidad que podemos analizar (table 14 y figure 28) nos indica una situación que se viene repitiendo: valores por debajo de la media nacional y que mantienen esta diferencia si no la aumentan.

Así, los valores nacionales tienen una tendencia, a partir del año 1.996, a recuperar valores y la de León se mantiene estabilizada a partir de esas mismas fechas, lo que coincide con las valores previamente analizados: un estancamiento de los índices poblacionales, por debajo de la media nacional, con una ligera tendencia a la recuperación.

Fig. 28: Tasa Bruta de natalidad

Fuente: INEbase y elaboración propia

Del análisis de las dos tablas anteriores (table 15 y table 16) podemos deducir una conclusión redundante: valores por debajo de la media nacional y, en este caso, un ISF muy bajo con un valor inferior a la unidad, lo que augura un futuro poco halagüeño en lo que respecta a la capacidad de renovación generacional.

También se observa un valor muy bajo de tasa de fecundidad general, circunstancia posiblemente propiciada por la emigración de la mujer en edad fértil, lo que reporta un bajo número de nacimientos en la provincia y produce ese bajo ISF.

En la tasa de fecundidad específica por edad vemos claramente el marcadísimo grupo de los 30-34 años, circunstancia que se puede deber a que las formas de vida han cambiado, especialmente a la entrada de la mujer en el mundo laboral y en el mundo estudiantil, lo que conlleva un retraso en la edad del matrimonio, y un retraso en la edad de tener los hijos, teniendo estos ahora un carácter de carga y de gasto que era justo al contrario en el mundo rural anterior al que se vive actualmente en esta provincia, como en la mayoría del estado, puesto que los hijos suponían más mano de obra y por tanto más ganancias para la familia.

En cuanto a la mortalidad se observa una clara posición por encima de la media nacional, seguramente por ser una zona con residencia de muchas personas mayores, más próximas al fallecimiento, y a la ausencia de personas que podía fallecer por las causas más habituales en las nuevas épocas, nuevas enfermedades relacionadas con la forma de vida de las grandes ciudades (estrés, ansiedad, etcétera) y sobre todo por los vicios que se adquieren actualmente (alcoholismo, tabaquismo, drogadicción, etcétera).

Es de destacar el aumento que se produce en el año 2001, coincidiendo con un ligero descenso de la media nacional o estancamiento de la misma.

Fig. 29: Tasa bruta de mortalidad

Fuente: INEbase y elaboración propia

Fig. 30: Tasa de mortalidad infantil

Fuente: INEbase y elaboración propia

Considerando los datos de la tasa de mortalidad infantil (table 19 y figure 30) observamos una situación un poco irregular en la trayectoria de la tendencia de la provincia de León, con una serie de subidas y bajadas en forma de sierra, mientras la tendencia nacional se mantiene en un constante descenso. La tendencia de León es a convergir con la media nacional, cosa que parece se empieza a lograr a partir del año 1999, descendiendo incluso por debajo de la media nacional, y manteniendo en la actualidad, a falta de los último datos, una estabilidad uniforme.

Como conclusión a esta fase de estudio se analiza el crecimiento vegetativo, que aporta unos datos muy esclarecedores y claramente pesimistas para el estudio del futuro de esta provincia.

Según estos datos (table 20 y figure 31) observamos una clara tendencia negativa desde los años 70 hasta la actualidad, con un inicio de crecimiento negativo el año 1987, y que llega en la actualidad a superar en forma negativa el índice positivo de crecimiento del año 1975.

Esta tendencia, que en el inicio es superior a la media nacional, pasa a ser negativa, alejándose cada vez más de ella y sin reaccionar en el descenso cuando la media nacional comienza, en el inicio de los años 90, una tenue desaceleración y progresiva tendencia a la recuperación, encontrándose en la actualidad en franco descenso.

Fig. 31: Crecimiento vegetativo

Fuente: INEbase y elaboración propia

El saldo del movimiento migratorio interior es negativo para la provincia de León, siendo los principales destinos Madrid, Asturias, Barcelona, Alicante y Valladolid, por orden de importancia.

Las principales orígenes de la inmigración son Madrid, Asturias y Valladolid, quizás como demanda de técnicos cualificados y/o como retorno de emigraciones previas.

Este índice negativo de la migración es compensado algo con el saldo de inmigración de extranjeros que tienen como destino la provincia de León, pero no logra llevar los valores a un punto de neutralidad.

El estudio podría completarse con el análisis de la inmigración de leones que retornan desde el extranjero y los leoneses que emigran al extranjero.

El número de inmigrantes españoles procedentes del extranjero en el año 2001 es de 226 personas. El dato de emigración al extranjero procedentes de la provincia de León en el año 2001 es de cero personas, por lo que llegamos a la conclusión de un saldo negativo de emigración en el año 2001 de 143 personas.

Este estudio se puede completar con el análisis de otros periodos anuales, pero quizás se salga del ámbito de este trabajo.

Del análisis de la Encuesta de Población Activa, EPA, podemos deducir una tasa de paro similar a la media nacional, con una Tasa de Actividad y Tasa de Empleo inferior en nueve puntos a esa media nacional.

Dada la premura de tiempo no es posible aportar más información para un correcto análisis de la situación económica, pero se puede concluir con una serie de consideraciones, como son una tendencia a la industrialización y al dominio de los sectores terciarios que, junto con una tendencia hacia el aumento de la natalidad, la disminución de la emigración y aumento de la inmigración, puede llegar en periodo próximo a aproximar los parámetros de calidad de vida y situación de bienestar en la provincia de León a las medias nacionales y europeas.

10 de Septiembre de 2004

• figure 1 – Provincia de León
• figure 2 – Montaña leonesa
• figure 3 – Valle encajado
• figure 4 – Paisaje bioclimático
• figure 5 – Poblamiento

• table 1 – Crecimiento absoluto y relativo de la población nacional y de la provincia de León
• table 2 – Población de hecho 1900 - 2001 y % provincia de León
• table 3 – Evolución de la población nacional y provincial de León (1986-2001)
• table 4 – Evolución de la densidad de población (Hab/Km²)
• table 5 – Evolución de la densidad de población en la Provincia de León
• table 6 – Población nacional y provincial por edad (grupos quinquenales) y sexo. (2000)
• table 7 – Variaciones en la población de derecho Censos 2001, 1991 y 1981 CCAA y provincias
• table 8 – Valores totales y porcentuales de grandes grupos de edad
• table 9 – Indices de Vejez y Juventud
• table 10 – Tasas de dependencia
• table 11 – Sex ratio
• table 12 – Índice de dependencia
• table 13 – Mujeres en edad fértil
• table 14 – Tasa Bruta de Natalidad (‰)
• table 15 – Tasas de fecundidad en índice sintético de fecundidad (ISF) - España
• table 16 – Tasas de fecundidad en índice sintético de fecundidad (ISF) - León
• table 17 – Tasa bruta de mortalidad (‰)
• table 18 – Tasa de mortalidad específica por edad y sexo - Año 2001
• table 19 – Tasa de mortalidad infantil (respecto de los nacimientos)
• table 20 – Crecimiento vegetativo
• table 21 – Migraciones interiores
• table 22 – Inmigraciones exteriores
• table 23 – Encuesta de población activa
• table 24 – Tasa de actividad
• table 25 – Empresas por provincia y estrato de asalariados
• table 26 – Locales por provincia. Actividad principal. - León
• table 27 – Explotaciones, superficie total y superficie agrícola utilizada (SAU)

• figure 6 – Crecimiento relativo de la población de España y León (1900-2001)
• figure 7 – Tendencia evolutiva de la población de León (1900-2001) respecto al índice nacional (en %)
• figure 8 – Crecimiento relativo de la población de España y León (1986-2001) - VARONES
• figure 9 – Crecimiento relativo de la población de España y León (1986-2001) - MUJERES
• figure 10 – Evolución de la densidad de población en España y en la provincia de León
• figure 11 – Evolución de la densidad de población en la provincia de León
• figure 12 – Variaciones relativas de población por provincias
• figure 13 – Pirámide de población de España
• figure 14 – Pirámides de población de España y León
• figure 15 – Evolución de los grandes grupos de edad - Nivel Nacional
• figure 16 – Evolución de los grandes grupos de edad - León
• figure 17 – Evolución de los grandes grupos de edad - Nivel Nacional - Varones
• figure 18 – Evolución de los grandes grupos de edad - León - Varones
• figure 19 – Evolución de los grandes grupos de edad - Nivel Nacional - Mujeres
• figure 20 – Evolución de los grandes grupos de edad - León - Mujeres
• figure 21 – Índice de Vejez
• figure 22 – Índice de Juventud
• figure 23 – Tasa de dependencia Juvenil
• figure 24 – Tasa de dependencia Anciana
• figure 25 – Sex ratio
• figure 26 – Índice de dependencia
• figure 27 – Mujeres en edad fértil
• figure 28 – Tasa Bruta de natalidad
• figure 29 – Tasa bruta de mortalidad
• figure 30 – Tasa de mortalidad infantil
• figure 31 – Crecimiento vegetativo